Los aditivos poliméricos para hormigón son materiales que se utilizan para mejorar el rendimiento del hormigón. Mejoran las propiedades físicas y químicas del hormigón mediante la introducción de polímeros, mejorando así la resistencia, durabilidad, trabajabilidad, etc. del hormigón. Los aditivos poliméricos se pueden dividir en varios tipos, incluidos polímeros solubles en agua, polímeros en emulsión, polímeros en polvo y polímeros reactivos.
Tipos de aditivos poliméricos.
Polímeros solubles en agua: estos polímeros generalmente existen en forma de soluciones acuosas, que incluyen principalmente alcohol polivinílico (PVA), poliacrilamida (PAM), etc. Los polímeros solubles en agua tienen buena dispersabilidad y pueden distribuirse uniformemente en el concreto para mejorar la trabajabilidad. Impermeabilidad y resistencia al agrietamiento del hormigón.
Polímeros en emulsión: los polímeros en emulsión son un tipo de polímeros elaborados mediante polimerización en emulsión, y los más comunes incluyen copolímeros de estireno-acrilato y copolímeros de etileno-acetato de vinilo. Este tipo de polímero puede mejorar las propiedades de unión del hormigón y aumentar la tenacidad y la resistencia al agrietamiento del hormigón.
Polímeros en polvo: los polímeros en polvo se pueden agregar directamente a las mezclas secas, como el polvo de etileno-acetato de vinilo (EVA), el polvo de acrilato, etc. Estos polímeros en polvo pueden mejorar la resistencia a la compresión y la resistencia al congelamiento y descongelamiento del concreto, y también ayudan a reducir la contracción. y agrietamiento del concreto.
Polímeros reactivos: estos polímeros pueden reaccionar químicamente con los componentes del cemento para formar un material compuesto más estable y duradero. Por ejemplo, las resinas epoxi, los poliuretanos, etc., pueden mejorar significativamente la resistencia a la corrosión química, la resistencia a la permeabilidad y la resistencia al desgaste del hormigón.
Mecanismo de acción de los aditivos poliméricos.
Los aditivos poliméricos mejoran el rendimiento del hormigón mediante efectos físicos y químicos. El efecto físico es principalmente llenar los poros de la pasta de cemento, aumentar la densidad del hormigón y reducir la permeabilidad al agua. El efecto químico es formar un material compuesto elástico mediante la interacción entre el polímero y los productos de hidratación del cemento, mejorando así la tenacidad y durabilidad del hormigón.
Mejorar el rendimiento de la unión: los aditivos poliméricos pueden formar una película entre las partículas de cemento y los agregados, mejorar la unión entre los dos y, por lo tanto, mejorar la resistencia y la resistencia al agrietamiento del concreto.
Reducir las grietas por contracción: algunos polímeros pueden aumentar la flexibilidad y ductilidad del concreto, reducir las grietas causadas por la contracción y así extender la vida útil de las estructuras de concreto.
Resistencia a la corrosión química: los aditivos poliméricos pueden mejorar la resistencia a la corrosión química del hormigón, especialmente en ambientes corrosivos como ácidos, álcalis y sal. Estos polímeros pueden prevenir eficazmente la intrusión de medios corrosivos y proteger las estructuras de hormigón.
Mejorar la resistencia al hielo y deshielo: en zonas frías, el hormigón suele resultar dañado por los ciclos de hielo y deshielo. Los aditivos poliméricos pueden mejorar eficazmente la resistencia al hielo y al deshielo del hormigón al mejorar su densidad y resistencia al agrietamiento.
Áreas de aplicación
Los aditivos poliméricos se utilizan ampliamente en muchos campos, entre ellos:
Ingeniería de la construcción: en la construcción de edificios residenciales y comerciales, los aditivos poliméricos se utilizan a menudo en pisos, paredes y otras partes para mejorar la resistencia a las grietas y el efecto decorativo del hormigón.
Carreteras y puentes: los aditivos poliméricos se utilizan ampliamente en la construcción de carreteras y puentes para mejorar la resistencia a la compresión y la durabilidad del hormigón, extendiendo así la vida útil de la infraestructura.
Proyectos de conservación de agua: en proyectos de conservación de agua, como embalses y presas, los aditivos poliméricos pueden mejorar la impermeabilidad y la resistencia a la corrosión química del hormigón, garantizando la seguridad y estabilidad del proyecto.
Proyectos de reparación: los aditivos poliméricos se utilizan a menudo para reparar y reforzar estructuras de hormigón antiguas, mejorar su resistencia estructural y durabilidad y evitar el alto coste de demolición y reconstrucción.
Los aditivos poliméricos para hormigón son una parte importante de la tecnología moderna del hormigón. Mediante la introducción de diferentes tipos de polímeros, se han mejorado significativamente diversas propiedades del hormigón. Ya sea en construcciones nuevas o en la reparación de estructuras antiguas, la aplicación de aditivos poliméricos tiene una importancia práctica importante. Con el avance continuo de la tecnología, los futuros aditivos poliméricos optimizarán aún más el rendimiento del hormigón y cumplirán con los requisitos de ingeniería más exigentes.
Hora de publicación: 29 de agosto de 2024