Carboximetilcelulosa de sodio en bebidas con bacterias del ácido láctico

La carboximetilcelulosa sódica (CMC) se utiliza comúnmente en la industria de alimentos y bebidas como espesante, estabilizador y emulsionante. En bebidas de bacterias del ácido láctico (LAB), la CMC se puede utilizar para mejorar la estabilidad y textura del producto.

Las bebidas LAB son bebidas fermentadas que contienen cultivos de bacterias vivas, como yogur, kéfir y bebidas probióticas. Estas bebidas son conocidas por sus beneficios para la salud, incluida una mejor digestión e inmunidad. Sin embargo, la presencia de bacterias vivas también puede hacerlas susceptibles a cambios de textura y estabilidad con el tiempo.

Al agregar CMC a las bebidas LAB, los fabricantes pueden mejorar su textura y estabilidad. La CMC puede ayudar a prevenir la sedimentación y separación de sólidos, que pueden ocurrir debido a la presencia de cultivos de bacterias vivas. También puede mejorar la sensación en boca y la viscosidad de la bebida, haciéndola más agradable de consumir.

Además de sus propiedades funcionales, la CMC también es segura para el consumo y no afecta el sabor ni el sabor de la bebida. Es un aditivo alimentario de uso común y ha sido aprobado por agencias reguladoras como la FDA en Estados Unidos y la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria en Europa.

En general, el uso de CMC en bebidas LAB puede ayudar a mejorar la calidad y el atractivo de estos productos para el consumidor, manteniendo al mismo tiempo sus beneficios para la salud y su valor nutricional.